En este nuevo programa estamos acompañados del Atleta Pedro Marín, un atleta profesional con un gran curriculum, varias veces campeón de Andalucía y 3º en España en la categoría absoluta.
Con él vamos a tratar de explicar las diferencias entre fascitis o fasciosis plantar y espolones, dos problemas que se suelen confundir.
¿Qué es la fascitis plantar?
La fascitis o fasciosis plantar es un desgaste en la musculatura que tenemos en la planta del pie. Es muy frecuente en el día a día y sucede mucho en atletas debido al impacto directo que se produce sobre la planta del pie. La fascia o tejido que tenemos en la planta del pie cuando se inflama, se engrosa o se desgasta produce la fascitis plantar.
La fascia plantar cubre la cara interna del pie y suele tener una anchura normal de entre 2 y 4 milímetros. Cuando el grosor supera los 4 milímetros, se considera que se sufre una fascitis plantar. Es muy frecuente que la fascitis plantar tenga porosidad, por lo que en este caso se denomina fasciosis. Esto es importante a la hora del tratamiento, ya que no va a ser lo mismo tener una inflamación aguda que un proceso crónico de desgaste.
¿Por qué se confunde la fascitis con los espolones calcáneos?
Los espolones se producen por tener una tensión crónica de más de 6 meses en la planta del pie. Es un proceso de arrancamiento de pequeños trozos de hueso calcáneo produciéndose una calcificación. Cuando nos duele el talón, sobre todo al levantarnos y en los primeros pasos, ese dolor crónico puede producir a la larga un espolón. El origen de este dolor está en el tejido blando de alrededor, inflamado o desgastado, que es lo que nos produce el dolor. Un efecto rápido en esa zona es mucho más eficaz que tratar en el propio hueso. Aquí puedes informarte más sobre el espolón calcáneo y las calcificaciones.
¿Cómo se trata una fascitis plantar?
Una fascitis plantar, cuando es por un mecanisco biomecánico, de mal apoyo, con el podólogo se realiza una plantilla, para evitar el golpe que se produce en el pie y además se cambia la estructura del pie. Además es necesario trabajo fisioterapéutico mediante las ondas de choque focales, hacen un efecto bueno para las osificaciones que localizamos mediante ecografía. Si la fascia plantar viene con mucho desgaste se utiliza la electrólisis (EPI) que trabaja la zona produciendo un estímulo para regenerar el tejido. También el láser de alta potencia realiza una oxigenación mediante fotomodulación, para que lleguen muchos más glóbulos rojos y mucho más oxígeno y se cicatriza antes.
¿Qué tiempo de recuperación puede tener una fascitis plantar?
Dependiendo del grado de la fascitis, entre 3 y 6 sesiones o semanas suelen ser suficientes para la recuperación.
Es muy importante acudir al fisioterapeuta una vez detectemos esos dolores al levantarnos, ya que esto reducirá en gran medida la recuperación.
¿Qué recomendaciones podríamos tener para evitar la fascitis plantar?
Es muy importante un calzado que amortigue, que tengan algo de cuña, que nos sujete el pie y que sea flexible, y sobre todo evitar el uso de tacones. En deportistas, hay que tratarse de vez en cuando para evitar molestias.
